Antinomianismo es la creencia de que bajo la dispensación de la gracia, la ley moral no sirve de nada, y rechaza una moralidad establecida socialmente.  ¡Levántate Iglesia!  Hebreos 10:26-29 se refiere a esto como pisotear al Hijo de Dios y tener por inmunda la sangre del pacto (profanando la santa sangre que Cristo ha derramado por nosotros), e insultando al Espíritu de Gracia.

Tristemente, muchos utilizan la Gracia no como un don de Dios, sino como una excusa para justificar sus deseos.  Algunos utilizan los Mandamientos como una soga legalista, mientras que otros ignoran  al Espíritu como un maestro de escuela que nos guía  y nos protege de causarles daño  a los demás y de avergonzar el Nombre de Cristo.  Cuando algunos son  parte de una relación, no están unidos para expresarse amor y respeto debido a la ley, sino porque están enamorados.  De la misma manera, mi deseo de honrar al Señor no está basado en una visión legalista, sino en el deseo de un corazón agradecido para amarle a Él y ser una expresión tangible de Su amor por otros.  Mis libertades no son una excusa para vivir de tal manera que permita que otros vivan en libertinaje.

-Doug Stringer